El bienestar se basa en el equilibrio, así que, para sentirte bien y trabajar al máximo, es importante considerar un enfoque holístico. Una correcta nutrición e hidratación, así como descanso adecuado y el cuidado personal son la clave, pero recuerda, tu rutina de ejercicio es igual de importante.

¿Sabías que el ejercicio es un “estrés sano” para tu cuerpo? Cuando este estrés sano se repite constantemente, puede fortalecerte, mantenerte en forma y conducirte a una mejor salud cerebral y cardiovascular. Sin embargo, el ejercicio sin una nutrición adecuada puede resultar contraproducente. Puedes reducir la cantidad de estrés y la tensión de tu cuerpo brindándole lo necesario durante cada etapa del ejercicio.

• Antes: Prepárate para potenciar tu entrenamiento con un impulso de cafeína.
• Durante: Restituye los electrolitos perdidos en el sudor y mejora tu hidratación.
• Después: Regenera y repara la masa muscular por medio de proteínas y carbohidratos.